Darle esa mano simbólica a Haroldo, Rodolfo, Héctor y a tantísimos ejemplos en mi vida es mi objetivo, que a través del muralismo, trataré de ir cumpliendo.
En breve le le daré la mano a Paco Urondo, ese Paco pasional, militante, poeta, narrador, artista.
Preparar un boceto me involucra de una forma emocional con los homenajeados. Tengo que respirar un poco de su aire,leer sus escritos y ver, mirando sus fotos y la de sus seres queridos como amaba y porque luchaba.
Luego, tratando de incluir poética en la construcción del imaginario del mural, metaforizo, acuden a mi miles de imágenes ya realizadas por otros artistas y no.
Un boceto madura en si mismo. Permite cantidad limitada de imágenes y te invita a seguir tu homenaje en otro momento y en otro lugar.
Iré publicando este recorrido hasta la concreción de la obra. Mientras tanto les voy dejando apuntes en una página en el blog. El lugar donde realizaré el mural tiene que confirmarse. M.C.
Un cóndor montonero |