RESCATE EMOTIVO


En el año 2004, junto a los compañeros de la empresa recuperada Cooperativa Chilavert artes gráficas, los integrantes de su centro cultural, Martín y Anita, y los alumnos del Taller de Arte Público y Muralismo de la Escuela Pública de Bellas Artes "Manuel Belgrano" organizamos la segunda versión de la jornadas de muralismo que iniciamos en 1997 con el padrinazgo de Carpani y Campodónico. Esta vez en medio de un escenario esperanzador y combativo como lo son la empresas y fábricas recuperadas. No voy a detenerme ahora en los pormenores organizativos, ni porque esto pasó inadvertido habiendo contado con la presencia y la colaboración de artistas y pensadores tan importantes como Fernando Calzoni, Raúl Ruiz, Gerardo Cianciolo, Alfredo Fernandez, el Grupo Contraluz, Juan Bauk, Patricia Aballay, Norberto Galasso, Jorge Falcone, Fernando Buen Abad, Adolfo Colombres, Carlos Juliá, el cantor Ariel Acuña y el cineasta Alejandro Fernandez Mouján entre muchos que hicieron posible este encuentro. Sólo les dejo este fragmento de la ponencia de Jorge Falcone y el link para leerla completa y el recuerdo en ella de un testimonio de épocas que superaremos, con la pétrea convicción de sólo lo haremos sin olvido ni perdón. M.C.

Ponencia para "Segundas Jornadas de Arte Público Latinoamericano - Buenos Aires- 2004" celebradas en Gráfica Chilavert Recuperada, del 12 al 16 de octubre.


Hacia una lírica de emergencia

(...)El poeta como ladrón de la imaginería popular
En todo caso, la habilidad de quien ha elegido una poesía referencial como su medio de expresión será la de percibir y capturar los datos de aquella esencialidad que -según el autor de "El Principito"- sería invisible a los ojos; lo que a mi leal saber y entender, y como tantas otras cosas, se logra a fuerza de observación y trabajo. Y, lógicamente, asumiendo a la vez un compromiso afectivo con la tarea que se desea acometer. Referiré brevemente un par de ejemplos de mi cosecha a fin de aclarar lo que expongo. El primer caso vinculado a la retransmisión oral y el segundo a la vivencia directa. Mi poema titulado "Composición: La Vaca" surgió casualmente ante la sórdida descripción de un hecho acaecido en un barrio muy pobre de la Provincia de Buenos Aires durante los saqueos de 1989, el cual me fue referido con particular elocuencia por un testigo directo. El impacto emocional que me produjo la anécdota, consistente en el descuartizamiento de un animal vivo a manos de la población famélica, fue en mi tan poderoso que me indujo a contrastar violentamente la escena con aquellas ingenuas composiciones literarias que nos eran reclamadas desde una escuela primaria remota e irreal. Si tiene algún valor comunicativo, seguramente nace de semejante contraste. En él coloqué mi condimento autoral:

Composición: La vaca

Señorita "Chispa" Migues,
Maestra de mi primer grado:
He tratado, desde aquellos días,
de ser como soñaba usted.
Hoy confieso,
Segunda Madre,
Que no me fue del todo bien.
Los vigilantes no se dedican,
como en las lecturas de "Agüita Clara",
a cruzar la calle a las viejecitas.
Los abuelos ya no comparten
ni las faldas ni los cuentos
sino la desesperación.
Ya no canta como entonces
"El sapito Glo Glo Glo".
Y he sabido que Sarmiento,
maestra,
no sólo no faltaba nunca a clase
sino que -de grande-
se dedicó a regar la pampa
con la sangre del criollaje.
He buscado, no obstante,
como se ve,
mantener mi letra pareja,
no comerme los mocos,
y aprender de los mayores
(Solo obtuve -de ese modo-
historias de inconclusas gestas).
De tanto en tanto
He intentado,
Como lo hacia en su clase,
Plasmar imágenes sobre un papel.
No hay caso:
Me llevo mal con la belleza impuesta.
Pruebo...
"Composición: La vaca"
Y no acude en mi auxilio
La estampa bucólica
de los caramelos "Cremalín",
sino la bestia desaforada
que empujaron a la villa
en los días del saqueo,
y pinto literariamente un festín dantesco
de harapos, sangre y bufidos:
"Clava su cornamenta en el polvo
y la busca,
cual plaga de langostas,
un enjambre de cuchillos.
Muge brutalmente y se tumba.
Se yergue y huye torpemente
cayendo sin tregua sobre el costado
en donde hasta hace poco
la sustentaba una pata.
Tose muerte y se estrella
contra el alambrado.
Después,
viejos, mujeres, y niños...
Gente con hambre que danza
en derredor sin que entienda.
Y se la lleva
de a partes".
Lo sé,
maestra de mi primer grado,
nunca volverá usted
a ponerme MUY BIEN DIEZ.-