RAFAEL CAUDURO

Tal vez no proceda de la clara "estirpe" muralística, quizá no pretenda ser incluído entre los grandes muralistas, pero una vez mas el arte y el poder pone en una encrucijada al artista. Ser consecuente o ser obsecuente. Conformista o crítico. Cauduro nos lleva a otro tipo de "espacios comunes" aquellos que plantean lo tenebroso de una sociedad. Si en América el artista se define por la actitud, Cauduro no calló y guardó las metáforas para otro tipo de poética. Recoje la bandera que asentó Orozco en nuestro campo de lucha y sobre todo incentivó a los investigadores,criticos, historiadores y creadores a plantearse una nueva discusión entre ética y estética teniendo nuevamente al muro como espacio que refleja una realidad padecida.
Que  la obra no está hecha en un espacio público de fácil acceso? es verdad pero el acceso es posible y el común del pueblo debe hacer uso de ese derecho y recuperar ese edificio con la sencilla excusa de visitar a un amigo que seguro Cauduro rescató con  expediente y todo, de un archivo olvidado. MC
Inauguraron el mural que Rafael Cauduro pintó en el recinto de la Suprema Corte
Ante el clamor de las personas por justicia, no es momento de celebrar, dice a La Jornada
Foto
Otro fragmento de la obra muralística de Cauduro, emplazada en la sede del máximo tribunalFoto Carlos Ramos Mamahua
Foto
Fragmento del mural La historia de la justicia en México, de Rafael CauduroFoto Carlos Ramos Mamahua
Ángel Vargas
Periódico La Jornada
Miércoles 15 de julio de 2009, p. 5
[...]Durante la inauguración del cuarto y último mural de esa serie, el creado por Cauduro, Ortiz Mayagoitia anunció la creación de quinto, con el cual, sostuvo el ministro presidente, daremos por terminada la vocación muralística de la SCJN.
La ceremonia tuvo lugar en el vestíbulo principal de la Suprema Corte y asistieron el titular de la Secretaría de Educación Pública, Alonso Lujambio; la presidenta del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, Consuelo Sáizar, y los ministros José Ramón Cossío Díaz y Mariano Azuela.
De igual manera acudieron, como invitados especiales, la presidenta del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, María del Carmen Alanís, y el maestro Cauduro.
Realidad por superar
Respecto de la obra de Rafael Cauduro intitulada La historia de la justicia en México, Ortiz Mayagoitia subrayó que en ella se nos recuerda que la lucha por la dignidad de la persona y la abolición de la fuerza ilegítima es una batalla de la democracia constitucional.
Foto
El artistaFoto Carlo Ramos Mamahua
El mural que inauguramos denuncia una desagradable realidad que no debe seguir siendo parte de nuestro paisaje. Es la visión del autor que nos reta a que estas escenas desaparezcan para siempre de nuestro país; para que permanezcan como imágenes, pero no como vivencias, agregó.
La visión aguda del maestro Rafael Cauduro retrata el presente y queda en manos de los mexicanos, de todos los mexicanos, que las próximas generaciones vean en él una realidad que fuimos capaces de superar y no el legado que les quisimos dejar.
De 290 metros cuadrados, distribuidos a lo largo del cubo de los tres niveles de la escalera surponiente de la sede de la SCJN, esa obra consta de ocho piezas o paneles en los que el creador plasmó siete crímenes mayores, entre ellos la tortura, el homicidio, la represión, el secuestro y la violación.
Visión crítica del pintor
En breve entrevista al término de la ceremonia, Rafael Cauduro explicó que para él resultaba indispensable plasmar una visión crítica de la justicia, ante las circunstancias que marcan la vida del país y el mundo hoy día.
Era importante esa visión crítica, sobre todo porque es la materia prima de la justicia. Es decir, realmente la justicia existe porque existen los crímenes. Entonces, en estos momentos en que el clamor de las personas es por la justicia, no era momento de celebraciones, y sí de meditación. Por eso puse estas imágenes, indicó el pintor.
Este mural es una invitación a la meditación sobre la injusticia, sobre los errores de la justicia, sobre qué le da forma a la justicia, que es precisamente el crimen; y es una meditación que está hecha para que permanezca. Me encantaría que sucediera lo que el ministro Ortiz Mayagoitia dijo sobre que ojalá todas estas imágenes, dentro de unos años, sean simplemente un anecdotario del pasado.