El Surrealismo y la mujer. MARUJA MALLO, la última surrealista.

El surrealismo, al igual que otros muchos movimientos, no se centró solamente en la obra plástica. Fue un movimiento amplio que centrado en París abarcó también las obras literarias. Pronto se extendió al resto de Europa, a países como España, Bélgica, Suiza… y como es lógico nació en una situación político-social y económica determinada. André Breton fue el que redactó el Primer Manifiesto Surrealista en 1924.



MUJER CON CABRAS de Maruja Mallo



Pero lo que me interesa constatar en la entrada de hoy, en esta fecha tan señalada que es el 8 de marzo, es lo que supuso el surrealismo para la mujer, o mejor dicho para las mujeres artistas. Porque este movimiento fue el movimiento de vanguardia que más mujeres tuvo en sus filas. En un momento social en que la mujer reclamaba su derecho al voto, el surrealismo apoyó la creatividad de la mujer y dio una imagen de ella bastante diferente de lo que hasta entonces se tenía. Sobre todo le reconoció libertad para ser persona creativa, subversiva y con instintos de todo tipo. Y eso hizo que las mujeres artistas se aproximaran a este movimiento.


Aún a sabiendas de que el poso machista existía en el movimiento, de la misma manera que existía en la totalidad de la sociedad, se podría decir que el mero hecho de que la mujer pudiera expresarse desde el surrealismo o a través de él, y que tuviera, de alguna forma, la oportunidad de salir del rol impuesto para ella, ya es digno de tener en cuenta.


También es cierto que en muchos casos fue el hecho de tener relaciones con algún artista (hombre) del grupo lo que les acercó al surrealismo y que el redactor o redactores de los manifiestos eran hombres, pero se podría decir que este movimiento fue la catapulta para que, una vez siendo conscientes de su valía, las mujeres artistas maduraran sus obras y muchas de ellas, una vez fuera del surrealismo, tomaran su camino artístico. Hubo un gran número de mujeres que habían estado dentro o alrededor del movimiento y que más tarde realizaron una gran obra fuera de él.




BUSTO de Maruja Mallo



Se ha dicho que estas mujeres no lograron liberarse totalmente del rol tradicional de la mujer. También que tuvieron serias dificultades para conciliar familia y un estatus de mujeres independientes, pero eso es algo que aún hoy en día lo tenemos bien presente.


La realidad es que, primeramente dentro y posteriormente alrededor del surrealismo, muchas mujeres tuvieron la oportunidad de desarrollar su creatividad y realizarse como artistas.


Es por ello que en estos días quiero volver la vista a estas mujeres valientes y rompedoras que nos dejaron su arte y que en ocasiones no tuvieron la misma consideración que sus coetáneos. “artistas-hombres”





MARUJA MALLO


Comienzo por la que se ha llamado la última representante del surrealismo: Maruja Mallo. Nació Galicia en 1909. Integrante de esa generación del 27, vanguardista e independiente, nunca se sintió marginada por ser mujer. Estudiante de la Academia de San Fernando, asimilo las corrientes vanguardistas, aunque siempre se sintió atraída por lo popular. Su enorme vitalidad le llevó a participar en salones ilustrados, tertulias literarias, a visitar museos pero también a frecuentar la calle, tabernas y diferentes amigos.



VERBENA



Mujer fascinante, carismática, con su pelo a lo garçon y vestida con ropa colorista, nunca pasaba desapercibida. Amiga de Lorca, de Buñuel, de Alberti, de Dalí, fue una transgresora de su generación y una pionera en el arte moderno y también en el feminismo.



FÉMINAS



Mallo impone en su obra un orden basado en la geometría. Imágenes con lenguaje de realismo pero con temas totalmente surrealistas, aunque ella en su independencia de los “ismos”, no quería esta etiqueta.



PHOTOESQUEMA



Su obra gira alrededor de la vida moderna, de los deportes y las máquinas. Hay elementos futuristas y realistas en ella.



ELEMENTOS PARA EL DEPORTE



Pasó por una época tremendista en la que para inspirarse se paseaba por los vertederos madrileños.

Comenzó a sentirse incomoda con la pintura de caballete, algo normal en un ser libre como ella y dio rienda suelta a su creatividad en la cerámica y el mural, así como en la escenografía.



MÁSCARAS



Fue una mujer socialmente comprometida. La guerra civil le sorprende en Galicia y marcha a América ayudada por Gabriela Mistral. Su pintura “Trabajadores” dejó admirado a Neruda con el que compartió amistad y con “Arquitectura humana” inauguraría en Buenos Aires una serie dedicada al trabajo y la religión. Impartiría, en ese país y en Montevideo, conferencias sobre “El proceso histórico de la forma en las Artes”.




ARQUITECTURA HUMANA



Después de 25 años en América, regresó a España en 1964. Retomó el dibujo y realizó viñetas para “Revista de Occidente”. También tomó parte en diversas exposiciones de pintura y participó en tertulias, pero no pudo integrarse totalmente en un ambiente como el que reinaba en aquel tiempo en el país y se sintió de alguna forma marginada.



RACIMO DE UVAS



En 1982 recibió la Medalla deOro de Bellas Artes concedida por el Ministerio de Cultura. Murió a la edad de 94 años.


MARUJA MALLO con manto de algas


Su vida, como su obra, es excepcional y apasionante porque ella misma era surrealismo puro.


NOTA: Para mejor visualizar la fotografía “picar” con el ratón encima de las que interesen.

Para la lectura de entradas anteriores, ir a la ventana de la derecha y “picar” en los años y meses. Se desplegarán los títulos correspondientes a cada fecha.



Fuentes consultadas:

Archivo propio

Creación artística y mujeres “recuperar la memoria”, Marián L.F.Cao

Los últimos surrealistas

Fotografía: Archivo propio

La red